Escrito por Isael Pérez Olivier.

Lo bueno, Ana Laura N., ya no es una mujer desaparecida. Lo malo, Ana Laura N., se convirtió en una víctima más de feminicidio en Tlaxcala. Y lo peor, es que  Ana Laura N., no tendrá justicia.

Sí, lo leyó Usted bien, Ana Laura N., es ahora, la onceava víctima del delito de feminicidio en un estado gobernado por una mujer, la más votada en la historia de Tlaxcala Lorena Cuéllar Cisneros. Y en tan solo nueve meses y medio. ¡Wow!. Ver para creer.

Y no. No fue esclarecido el hecho por la triada investigadora de la Procuraduría General de Justicia del Estado, que integran el Ministerio Público, la Policía de Investigación y Peritos. Porque sus restos encontrados en un terreno de labor fueron reportados por habitantes de Xaloztoc. Ajá, como verá Usted, fue accidental el  hallazgo de su osamenta, nada que ver con la investigación oficial. Aunque al parecer hay nuevos indicios en el caso.

Y sí, claro que se trata ni más ni menos, que de un feminicidio de acuerdo a lo dispuesto por el Legislador ordinario en el Código Penal para el Estado Libre y Soberano de Tlaxcala, en el artículo 229. Que no nos quieran dorar la píldora.

Pues bien, se confirmó, que fue privada de la vida. Pero ¿Por quién?. No se sabe y quizás nunca se sabrá. Porque si fue Juan Carlos N., el principal sospechoso que murió en manos de elementos de la Policía de Investigación, se llevó su secreto a la tumba.

Entonces, no solo hablamos de un feminicidio no resuelto; sino que se suma a éste, el homicidio del detenido y principal sospechoso Juan Carlos N., que tampoco ha sido esclarecido. Y para él y para su familia, la justicia, creo que tampoco llegará. Que pena, pero al final no fue un solo hecho delictivo, sino dos, que quedarán en la sombra de la impunidad en la nueva historia que escribe morena con tinta carmesí.

Dos familias enlutadas que no sabrán sobre la verdad de los hechos, de cómo, cuándo, dónde y sobre todo, por qué, fue que murieron sus seres queridos.

Bueno, la familia del joven Juan Carlos N., sí lo sabe, porque él murió por las lesiones cerebrales que le causaron los actos de tortura a los que lo sometieron los Policías de Investigación que días después, le provocaron la muerte.

Exacto, como seguramente ya lo recordó amable lector, por la tradicional calentadita que le dieron para que cantara. Un método muy usual en la PGJE.

Por estos hechos, sí se quisiera, se podría aplicar la ley para que el delito de homicidio cometido por servidores públicos no quede impune, se conozca la verdad de los hechos y se garantice la reparación del daño. Pero como siempre y más en estos casos, simple y sencillamente no pasará. O ¿Usted qué cree?.

Por cierto, pregunto, de los feminicidios registrados de septiembre a la fecha ¿Cuántos están resueltos? ¿Cuántas carpetas de investigación se han judicializado, con y sin detenido? ¿Cuántos sentenciados hay por esos hechos?.

Y no me quiero meter con los homicidios dolosos de ciudadanos del sexo masculino, algo así como 60 o 70, entre ellos, el del exdiputado local Omar Milton López Avendaño, cifra que rebasa y por mucho, las estadísticas de mujeres privadas de la vida en la administración de Lorena Cuéllar Cisneros.

Si habláramos de productividad del Ministerio Público del fuero común, se podría decir, que apenas alcanzaría, por no regatear sus esfuerzos, un 10 por ciento de efectividad.

Y dejo constancia que pregunto solo por los registrados en nueve meses de la administración de Lorena Cuéllar Cisneros, pues si lo hago también por los de las administraciones anteriores, no me lo aceptarían, porque se sienten ajenos, cuando desde el 1 de septiembre del 2021 forman parte de su responsabilidad. Sí, ya sé, se los heredaron pero ahora son suyos y siguen sin ser esclarecidos.

Ahora que si mis cuentas alegres no son del gusto de las autoridades estatales, pongo a su disposición este mismo espacio para dar a conocer los datos duros y puros sobre el tema en comento.

Quizás, nos puedan desglosar cuántos homicidios se han registrado por razón de género, por arma de fuego, por linchamientos, por conflictos políticos, etcétera, etcétera, etcétera.

Queda abierta la invitación y el espacio.

¡Chusma, chusma, puff!.

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Sigue la nota roja a la Gobernadora…

Mal y de malas Lorena Cuéllar Cisneros. Primero, porque no ha explicado la razón que la motiva para mantener la Casa de Gobierno como residencia oficial y luego, cómo es que uno de sus habitantes o visitantes provocó un accidente vial sin asumir su responsabilidad legal.

Ni al conductor de la unidad ni a la propia Gobernadora, les importó, ya no los daños materiales que ocasionó el percance, sino la integridad física de las personas que ocupaban los dos vehículos particulares y el estado de salud de los elementos de la policía estatal a bordo de la patrulla que colisionó a las otras unidades , o de los menores de edad que circulaban en sus bicicletas, y que de no haber rodado por el piso, hubieran sido arrollados por alguno de los vehículos que participaron en los hechos. A eso se le conoce en el ámbito penal, como Omisión de Auxilio a Lesionados.

Sobra y basta con que una camioneta, de esas blindadas, que tiene a su disposición la “Casta Divina” o algún huésped distinguido de Casa de Gobierno tenga que salir, para que de inmediato uno de los porteros, con la mayor rapidez, pare en seco los vehículos que transitan por la calle, sin importar que los automovilistas tengan preferencia de paso.

Ya sabe Usted, cuando los patrones tienen prisa, no están dispuestos a esperar un par de minutos para salir de su fortín. Entiéndase de una vez, es la casa Cuéllar, por lo tanto es su calle, gobiernan en su estado, sí -suyo, de su propiedad-, y nosotros solo somos los intrusos desconsiderados y malagradecidos que se atraviesan torpemente en su camino.

No se sabe a ciencia cierta quién se trasladaba en la unidad que provocó el accidente vial. Dos versiones distintas circulan sobre el particular. La primera, apunta a que era una lujosa unidad en la que se trasladaba el yerno de la Gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros, el afamado constructor Fernando Lucio  Celis; mientras que otros aseguran, que  la unidad de lujo con vidrios polarizados era de una invitada de honor. Pero lo que si queda claro, es que se trató de un “Todo Poderoso” con licencia para matar.

En cualquier caso, el conductor de la unidad que provocó el percance, tuvo que hacerle frente a la situación, lo que no sucedió obviamente, porque le dio hueva atender un asunto sin importancia.

Claro que las aseguradoras se hicieron cargo de los daños materiales a las unidades colisionadas, pero ¿qué hay de la sensibilidad de la mujer más votada de la historia en Tlaxcala. O ¿es qué acaso, los afectados y las víctimas no le merecen un poquito de respeto?. Y nosotros sus gobernados ¿no nos merecemos una explicación?.

Un poquito de empatía no vendría nada mal en éste como en otros muchos casos. ¿No lo cree Usted así?.

¡Chanfle!.

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El Covid-19 y la celebración de la gran hazaña…

No se necesita ser un especialista en medicina para saber sobre el riesgo que implica hacer eventos masivos al inicio de la quinta ola de contagios por Covid-19.

Ya ven, hasta las que se sienten de otro planeta o hechas a mano, son vulnerables al mal del siglo, y si no me creen, pregúntenle a Lorena Cuéllar Cisneros y a Claudia Sheinbaum Pardo, quienes dieron positivo a Covid-19, a días de haber repartido besos y abrazos a miles de personas durante  la magna celebración de su hazaña electoral.

Gracias Lorena Cuéllar, por haber realizado un encuentro masivo que se convirtió en una importante cadena de contagios. Como siempre destaca Usted por sus atinadas decisiones.

¡Si serás. Si serás!.

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La Magistrada presidenta del TSJE,  ni se inmuta…

Otra semana más y no hay señales alentadoras sobre la transparencia con la que se debe conducir la titular del Poder Judicial, Mary Cruz Cortés Ornelas.

Los procedimientos por Presunta Responsabilidad Administrativa derivados por supuestos casos de corrupción de jueces, duermen en algún rincón del TSJE, el sueño de los justos.

Que pena, pero que bueno es conocer de que lado de la justicia está.

¡No contaba con su astucia!.

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Malo para gobernar, pero bueno para sus maldades…

El coqueto alcalde de Huamantla Salvador Santos Cedillo, no solo ha encontrado una férrea oposición de sus exempleados masculinos a someterse a sus más bajos instintos, sino también, los grupos delincuenciales que azotan su demarcación política. De lo que le platicaré en una próxima entrega.

No estaría mal que ahora que Don Salvador Santos Cedillo, se va a tomar 15 días de vacaciones en Alemania, que el Cabildo le aprobara un buen descanso, no sé, de algo así como: dos años y meses para que analice su vida personal y su falta de capacidad para enfrentar el tema de la inseguridad.

Me comentan que esperaban más de él, pero quizás el problema no es que no quiera, sino que no puede. Ya sabe Usted, dicen, que hizo pactos con esa gente con la que no se juega.

¡Eso. Eso. Eso!.

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Cambio en el gabinete estatal…

Pero ¿quién re jijos es Juan Tapia Pelcastre?. Pregunto, porque sí se trata solo de un movimiento en la Secretaría de Movilidad sin sentido y solo para darle espacio a un recomendado de Víctor Cánovas González, ya valimos Barriga Señor Pistola.

Es más, si se me permite, con ello se confirmaría, lo que es un secreto a voces, que los militantes y simpatizantes de Morena, para la jefa del Ejecutivo estatal, no son más que fieles súbditos a los que alimenta con sobras de su administración. Rudo, pero no por eso falso el comentario.

¡Síganme los buenos!.

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Que pex en la jurisdicción no.1…

A quién le importa que más de 60 unidades médicas de salud no cuenten con medicamentos para los enfermos y que el personal que en ellas labora, lo hagan en condiciones precarias. ¿A la Gobernadora?. Claro que no. Pero a Usted y a mí sí, porque somos los que recibimos la atención.

Así como a Don Ramón, no le interesaba pagarle la renta al Señor Barriga, a la mandataria estatal no le importa el desabasto de medicamentos, ni la falta de agua potable, luz o teléfono en las unidades del sector. ¿Para qué?.

Así es que Blanca Águila y los suyos, haber cómo le hacen para brindar un servicio de calidad, pero el médico Eduardo Hernández Blas, no sale de la jurisdicción número uno y háganle como quieran, porque se trata del hijo de un influyente directivo de una empresa privada. Faltaba más.

¡Fíjate. Fíjate. Fíjate!.

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Le recuerdo amable lector que pongo a su disposición el correo electrónico enterceraintancia@gmail.com para recibir sus denuncias, quejas, dudas, sugerencias y comentarios. Hasta la próxima.